Begoña Gómez a Pedro Sánchez: «Enfréntate a todos»
Parece que el sueño de Begoña Gómez se ha desvanecido. «Pedro ganará» y «nos vemos en Moncloa» han sido las frases más repetidas por la esposa del líder del PSOE, Pedro Sánchez, desde aquel acto celebrado el 21 de junio de 2015 durante la proclamación del candidato socialista. Vestida de rojo y sin quitar la vista de su marido, la bilbaína, una auténtica desconocida hasta entonces, subió al escenario para fundirse en un abrazo y un tímido beso ante una enorme bandera de nuestro país.
La imagen les valió el sobrenombre de «los Obama españoles». Dejaron de piedra a muchos dirigentes socialistas. El partido daba un giro hacia unas formas diferentes, al presentar a la pareja al más puro estilo americano.
Desde ese día, Begoña pasó a ser una pieza esencial en los actos de su marido: desde su aparición en la gala de los Goya, hasta su presencia como acompañante en el debate de candidatos al que llegó luciendo un ajustado «Ted Baker» que obligaba a mirarla a ella, y no a Sánchez.
A Gómez nunca le importaron las encuestas ni tampoco los resultados electorales. Estaba convencida de que su marido, con el que contrajo matrimonio en 2006, llegaría a la presidencia del Gobierno y, por ello, no dudó en dedicarse en cuerpo y alma a apoyarle.
Tan entregada y segura estaba de ser la nueva inquilina de La Moncloa, que incluso cambió de imagen, eclipsando a su pareja en diversos encuentros políticos.
Ahora, desde el PSOE, han confirmado a LA RAZÓN que Begoña Gómez está preocupada por su marido y que es una de las que más le había animado a enfrentarse a las «fuerzas vivas socialistas».