Cuaderno electoral: Isabel Díaz Ayuso gana otra batalla (al imponer el sentido común) y el Ministerio de Sanidad renuncia a adelantar el toque de queda a las 20 h. en Semana Santa
El Gobierno de España ha decidido en el seno del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud mantener el documento de restricciones para Semana Santa y no adelantar el horario del toque de queda a las 20 horas, ante la oposición de algunas Comunidades Autónomas como la de Madrid, según fuentes de la reunión.
A lo largo de la jornada del miércoles, distintas informaciones aseguraban que la ministra de Sanidad Carolina Darias se habría puesto en contacto con algunos consejeros de Salud de distintas Comunidades Autónomas para sondear la posibilidad de adelantar el toque de queda a las 20.00 horas en Semana Santa.
Sin embargo, en el Consejo Interterritorial por la tarde no se ha acordado incluir ninguna nueva medida sobre horarios en lo referido al toque de queda y a la actividad no esencial.
El documento que se acordó hace unas semanas establecía las 23.00 como la hora límite para el toque de queda en estas fechas.
De hecho, en la reunión del miércoles ha estado presente el ministro del Interior Fernando Grande-Marlaska que ha señalado a las autonomías la necesidad de controlar las medidas que se desprenden de este documento compartido de actuaciones en la Semana Santa.
Además, ha habido varias CCAA que han pedido un control exhaustivo de las fronteras tras las críticas al Gobierno por permitir el turismo extranjero pero no la movilidad entre distintas autonomías. Aquí, Marlaska ha defendido el control que ya existe en los aeropuertos.
La presidenta de la Comunidad de Madrid Isabel Díaz Ayuso advirtió horas de la reunión del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud que no es partidaria de adelantar el toque de queda y recalcó que esto podría provocar que aumentasen las cenas en las casas.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, Ayuso ha sostenido que la posición del Ejecutivo regional en la reunión del Consejo Interterritorial «es la misma de siempre».
«No somos amigos de las ocurrencias cuando las cosas van funcionando bien. Todo aquello que funciona no hay que tocarlo mientras no suba preocupantemente el virus», ha dicho a continuación.
A su parecer, el adelanto del toque de queda puede hacer que el virus suba porque la gente trasladaría sus cenas a los domicilios. Además, ha recalcado que el cierre de la actividad económica también implicaría que se disparase «el virus».
«Consideramos que no hay que utilizar la pandemia para insuflar miedo, ni ahora ni nunca», ha declarado, para a renglón seguido señalar que quieren que cada decisión que se tome se haga «en base a criterios sanitarios, a informes estrictamente sanitarios».
El Gobierno alega que su temor a una cuarta ola en España le había llevado a plantear este refuerzo, en la línea de lo que han venido anunciado otros países como Alemania. Angela Merkel anunció este martes que confinaría al país en Semana Santa, pero este miércoles, sólo 24 horas después, consideró un «error» la decisión y dio marcha atrás.
En cambio, desde Moncloa se apostaba por aumentar las restricciones pese a que España tiene datos epidemiológicos mejores que los de Alemania.
La ‘ciencia’ a la que ha apelado desde el inicio de la pandemia el Ejecutivo socialista para darle base a sus decisiones es diferente en Madrid que en Berlín. Al menos, así se entiende si se comprueban las cifras de ambos países en los registros independientes de la Universidad de Oxford de los últimos días.
Según estos índices, Alemania registra actualmente una tasa de 164 contagios por cada millón de habitantes (a 23 de marzo), mientras que en España la cifra es de 105 casos por millón.
Redacción