La bicefalia volverá al PP de Madrid: Isabel D. Ayuso no liderará el partido aunque sea presidenta regional ni Susana P. Quislant será presidenta del PP de Pozuelo aunque sea alcaldesa
Mientras que en el exterior se debaten pactos electorales a varias bandas, en el PP de Madrid empiezan a situarse mentalmente y en clave interna para lo que será el día después.
La dimisión de Cristina Cifuentes de todos sus cargos hace ya más de un año dejó la presidencia regional del partido de forma provisional en una especie de gestora -aunque en Génova se resisten a llamarla con este nombre- encabezada por Pío García-Escudero que, después del verano, tendrá que dejar el puesto al candidato que resulte vencedor de la convocatoria de unas primarias.
Pese a que se trata de un proceso abierto a la militancia, todas las fuentes consultadas coinciden en que el elegido o la elegida será la persona a la que apadrine Pablo Casado desde la dirección nacional. Y otra creencia compartida: Aunque un acuerdo con Ciudadanos y Vox permita finalmente a Isabel Díaz Ayuso situarse al frente del Gobierno autonómico ella no será esa persona elegida.
Como Susana Pérez Quislant, aunque gobierne en solitario o con C’s, tampoco será la presidenta de la Agrupación pozuelera (salvo que Teo vuelva a señalarla con su dedo de la mano derecha del dios pepero)
Tanto Esperanza Aguirre desde 2004 como la propia Cifuentes, su sucesora en 2016, simultanearon el cargo de presidentas de la Comunidad y del PP regional durante sus mandatos, avalados en las urnas como mínimo por una mayoría simple. En Pozuelo también pasó con Adrados.
Pero antes de que ellas concentraran al mismo tiempo el liderazgo de la Puerta del Sol y el de la primera planta de la calle Génova, la bicefalia había sido la estructura orgánica habitual y será la que previsiblemente se recupere en una fecha aún por determinar en torno al otoño.
«Pablo va a optar por el modelo ‘aznariano’ del divide y vencerás», asegura un alto cargo de la formación en Madrid. Dicho de otra forma, pronostica una vuelta a la época en la que Alberto Ruiz-Gallardón y José María Álvarez del Manzano estaban al frente del Ejecutivo autonómico y del Consistorio de la capital, pero la dirección del partido la ostentaba precisamente García-Escudero de manera que ninguno de ellos acumulaba poder territorial excesivo.
Con la misma hipótesis de partida, otro ‘peso pesado’ de los populares regionales detalla que Casado escogerá a alguien «de su extrema confianza, que no levante ampollas, experto en la política de los equilibrios y con habilidad para coser las heridas que se han ido dejando».
Desde la dirección regional confirman que hay un «consenso generalizado» en el partido de volver al «modelo Pío» de la bicefalia.
«En cualquier caso, el que va a decidir el futuro de Madrid es Pablo, porque él es el que ‘corta el bacalao’ en Madrid: ganó indiscutiblemente el congreso nacional en Madrid, de los 6.000 y pico votos emitidos sacó casi 5.000, la militancia está con él y Madrid es una sucursal del poder de Pablo», explica un dirigente.
Entre los nombres que empiezan a circular por las quinielas internas como aspirantes a la presidencia del partido está el de Ana Camins, número tres de la candidatura de Díaz Ayuso y una persona que, según las fuentes consultadas, reúne todos los requisitos mencionados con anterioridad. En dicho proceso también podrían tener posibilidades Ignacio Vázquez, alcalde de Torrejón por mayoría absoluta, y consejeros con solera como Enrique Ossorio o Carlos Izquierdo, que también tiene una dilatada experiencia en la esfera municipal.
Aunque queda la baza de Antonio González Terol que acaba de arrollar en Boadilla del Monte, aunque no fuera el candidato.