Agradecimiento y reconocimiento del Grupo Municipal Ciudadanos de Pozuelo de Alarcón a Antonio Fraguas “Forges“

Dicen los expertos que las historietas humorísticas se constituyen como un discurso social. Discurso que nos pone ante el espejo. El espejo de nuestra realidad. Pero también espejo que refleja cómo nos vemos y cómo interpretamos los acontecimientos que van transcurriendo. Espejo que muestra cómo vamos evolucionando….
Ningún humorista gráfico mejor que Forges, ha mostrado la evolución del último medio siglo de la historia de España. Utilizando un lenguaje extraído de la calle y del costumbrismo social, nuestro vecino de Pozuelo, creó toda una extensa iconografía de personajes y situaciones cómicas que refleja la idiosincrasia y la sociología de la España contemporánea. Personajes y viñetas que fueran adoptándose a los cambios de nuestra sociedad.
Si bien es cierto que el humor está presente en todas las culturas, la ironía y la sátira forman parte del ADN de nuestro patrimonio cultural y social. Desde el dramaturgo Lope de Rueda, pasando por los geniales Cervantes, Quevedo, Lope de Vega, o el más reciente Mihura, entre muchos otros, la formación de nuestra identidad colectiva no puede entenderse sino es desde la utilización de este recurso que nace desde la empatía y florece desde las emociones. Las emociones más primarias, y reales, que se han contado y transmitido, a lo largo de nuestra historia, en géneros tan nuestros, como la picaresca o la zarzuela.
Recurso que, por otra parte, incita a la reflexión. Llamada a la reflexión y al análisis de la realidad social que fue una constante en la obra de Forges y que cumple con una importante función en la garantía de las libertades públicas de las Estados de Derecho. Al fin y al cabo, el humor gráfico aporta elementos importantes para analizar la realidad, ya que su “forma de expresarla” permite al lector acompañar, o no, esa reflexión de una manera dinámica y participativa. Es bien sabido que cuanto más presente esté el humor en una sociedad, mayor será su grado de madurez democrática y la de su clase política.
Por eso, en tanto que representantes de la madurez política de nuestro país, y en honor al legado de Forges, hoy a nuestro Grupo Municipal le gustaría reflexionar sobre los efectos positivos que tendría introducir el humor en nuestra dialéctica. Porque vean ustedes, compañeros de arena, la presencia del humor puede llevarnos a una política menos polarizada y más elegante. La elegancia que tiene el no gritar. La elegancia que tiene la de esgrimir los argumentos desde la inteligencia, la coherencia y la responsabilidad. La elegancia que tiene la sorpresa intelectual. En definitiva, la elegancia tan propia de la pluma de nuestro afamado vecino.
Para nosotros políticos, el humor debería ser herramienta muy útil para acercarnos a nuestros vecinos, y que ellos puedan percibirnos como personas “de carne y hueso”, con nuestras tribulaciones y vicisitudes, como los queridos personajes forgianos.
“Aristóteles decía que el hombre es el único animal que ríe”. Reírnos de nosotros mismos y de nuestras acciones nos obliga, sin duda, a tomar conciencia de nuestra identidad y a reflejar nuestra realidad en los discursos políticos. Como todo discurso, el humor posee un lenguaje a través del cual se puede observar la manera de construir el mundo percibido, sus transformaciones e interpretaciones. Y el mundo que pretendía construir Forges, a través de su obra, era el mundo de la cultura, el mundo del arte, de la inteligencia y del humor. Un mundo, que sacudiendo las consciencias y construyendo puentes, nos incitaba a creer que podía ser mejor.
Porque a fin de cuentas, el humor transciende de la realidad, llega a los corazones de las personas, pero sobretodo y lo más importante, el humor descansa en la memoria por un largo tiempo. Para que esa memoria perdure largo tiempo en nuestra ciudad, desde nuestro grupo municipal queremos sumarnos a los actos de reconocimiento y difusión de la obra de nuestro ilustre vecino.
Grupo Municipal Ciudadanos de Pozuelo de Alarcón