Mis cafés apócrifos con gente de Pozuelo: Hoy, con Diego de Aristegui y las zancadillas que le están haciendo los tiralevitas del Ayuntamiento de Pozuelo de Alarcón, cada día más nido de víboras

María, la mujer de mi socio, vino a verme a la tienda. Llevaba unas semanas desaparecida. Me daba excusas para todo. Ir a tomar café. Dar un paseo por el Parque Fuente de la Salud. Comer. Jugar unas cartas. O tenía médico. O salía de Pozuelo. O, simplemente, “no había visto la llamada, disculpa”. Algo le pasaba. Eso estaba claro. Y se lo dije a mi prima Paqui. María no era la misma.
Su entrada en la tienda me dejó helada. Su mirada y su ropa. Su pelo. Parecía otra. Cuando nos miramos, salí del mostrador para abrazarla. Sabía que lo necesitaba.
Paqui, por la tarde, me dijo que llevaba tiempo imaginándose la situación. Pero que no quería presionar. Mi socio había roto con ella. Se había marchado. La había dejado. María se sentía sola. Frustrada. Mayor. Rota. ¿Cómo poder ayudarla?
Hace unos meses María se planteó prepararse unas oposiciones para unas plazas que saldrían en la Casa Grande. Pero Manolo le dijo que ni lo intentara. Ahí solo entra quien quiere el gobierno. Yo no me creí tal afirmación. Luego quiso colaborar con una ONG pozuelera. Demasiado compromiso. Acudiría a la parroquia. Al coro, se dijo. Pero la pobre canta fatal.
Yo no sabía qué hacer. Y pensé en mandarla a ver a Diego Aristegui. El concejal de empleo. Diego es un señor. Además es muy educado. Y estoy segura que María se entendería muy bien con él. Aún recuerdo su forma de responderme en la Cruz Blanca. En esa cerveza apócrifa que me aceptó y que finalmente pagó él.
Intuía que se lo iban a liquidar. No sabía muy bien qué sucedería. “Total, Sira, a mí me ha nombrado Paloma Adrados miembro del Comité organizador de la Asamblea” (de la agrupación del PP de Pozuelo) y sin embargo, parece “como si Isa y yo fuéramos los mayores traidores del Ayuntamiento”.
A Diego le daba igual que nos vieran. Me dijo que detestaba las tonterías de las que estaba siendo testigo. Él solo quería trabajar y no tener problemas. No entendía que hubiera personas tan malvadas en la política. Me confirmó tantas sospechas que tenía, que por respeto hacia él decidí no publicarlas. Su sinceridad me conmovió. Tanto que no merece la pena ponerle en el disparadero. Meses después me consta que Diego lo está. La hermanísima no le soporta. No se fía de él. Total ella sabe que Diego es agradecido. Agradecido a Paloma Adrados. Y Almudenita sabe que Paloma Adrados sigue siendo la enemigo número uno de su desaparecido hermano. Presidente local del PP de Pozuelo. Enrique Ruiz Escudero. Diego es amable y educado. ¿Podría hacerle sombra a Enrique?
La Alcaldesa. Quislant. No le quiere. Por la misma razón. Adrados. Aristegui es tan diferente a ella. Él tan agradecido y ella tan… desagradecida. Y sospecha que Diego es un informador al que hay que quitarse de encima.
Enrique tampoco le tiene en gran estima. O si. La verdad es que Ruiz Escudero solo se fía de su hermana y se trabaja a los políticos de Sol. Pozuelo solo le ha servido para sus intereses. A los hechos me remito. Es el gran ausente de la sede y los actos del PP de Pozuelo. Los actos o las mesas electorales. Me dijo Manolo que ya se habla de él hasta entre los suyos. “El desaparecido”. Ni siquiera su fiel lacayo Manolo (se ríen todos) será capaz de parar los cotilleos de verdades sangrantes que circulan ya sobre Ruiz Escudero.
En la nueva familia Popular made in Almudena y Quislant destaca otro nombre que se dedica a ensuciar el nombre de otros compañeros. Guillermo García Madrigal. Un personaje apoyado por Enrique y Susana y repudiado por las personas más populares del PP. Guillermo no soporta a Diego. Podría ser su gran rival en las listas electorales. Como ha hecho con otros compañeros, concretamente, otra compañera, se dedica a ensuciar su nombre o lo intenta. Cuidado con las víboras y el veneno que sueltan. Pero es evidente que algunos solo pueden escupir veneno después de todo lo que tienen dentro. ¡Pobre Diego! Ponte a buen recaudo. Dicen que será el próximo fichaje. Pero por si hay algún interés en el personaje….que llamen a Las Rozas. Sería bueno saber qué tipo de personas quieren vivir a costa de nuestros impuestos.
La nueva secretaria de la sede, nueva asesora del Ayuntamiento y compañera de lista de los Ruiz Escudero, amén de su amistad con Almudena. Susana Penedo. También mira con recelo a Diego. Me dicen que por un lado le cae bien, pero por otro ha recibido una orden. ¡Qué pena de intereses personales hay en el PP de Pozuelo!
Y todo es un suma y sigue. Sin embargo Diego es un tipo honesto. Y supongo que ahora estará más tranquilo. Alejado del mundanal ruido de los pasillos, claustros y despachos de la Casa. Y María podrá ir a verlo con tranquilidad. Sin miedo a ser descubierta. Podría encontrar algún curso que le apetezca, que le motive. Podría encontrar una labor que realizar en su pueblo. Pero, en el peor de los casos, podría hablar con alguien que piensa como ella y que es de los pocos que merece la pena.
Aquella cerveza fue muy agradable. Cuando me desperté, se la conté a Luis. ¡Y se puso celoso! No pude más que reírme. “Cariño”, le dije acariciándole la barba, “no me gustan los hombres que fuman”.
Nos miramos los dos y nos reímos.
Sira Q.