25 años después, el cruce de piernas de ‘Instinto básico’ sigue siendo un misterio
‘Instinto básico’ fue la cuarta película más taquillera del año (se estrenó en marzo de 1992 en EE UU), y la más exitosa de la historia en España en su momento (se estreno en agosto de 1992).
Veinticinco años después queda un misterio, más jugoso y menos mortal, sin resolver. ¿Tenía el director el consentimiento de la actriz para retratar su entrepierna para la posteridad?
El detective con adicción al riesgo (y a todo lo demás) Nick Curran, interpretado por Michael Douglas, sabe que Catherine Trammell no lleva ropa interior. La ha espiado mientras se vestía en la escena anterior y ha comprobado que para Trammell la lencería es cosa de perdedoras. El público también lo sabe, y asiste a ese interrogatorio con la boca abierta.
¿Se atreverá a descruzar esas piernas para atolondrar a los machos de la manada? Por supuesto que sí. Catherine Trammell no ha llegado hasta ahí siendo tímida.
Existen dos versiones sobre cómo ocurrió la famosa escena. Según el director del filme, Paul Verhoeven, Stone sabía perfectamente lo que estaba haciendo y se mostró encantada con la perversa situación.
Según la actriz, el director la utilizó. “Cuando la rodamos, iba a ser una insinuación” afirma Sharon Stone, “pero [Verhoeven] me dijo: ‘Se puede ver el blanco de tu ropa interior, necesito que te la quites’. Él me aseguró que no se vería nada. Así que me quité la ropa interior y se la metí en el bolsillo de la camisa”.
El conflicto surge cuando al acabar el rodaje ambos analizaron el plano en cuestión. “En aquella época no existía la alta definición”, continúa la actriz, “así que cuando miré al monitor realmente no se veía nada”. Todo cambió cuando Stone, su equipo y el mundo entero vieron la película en una pantalla de cine de varios metros cuadrados.
El director holandés cuenta que Sharon Stone intentó por todos los medios eliminar el plano de su entrepierna en libertad. Verhoeven le respondió que ya era tarde.
El guionista, Joe Eszterhas, asegura que no escribió la escena del interrogatorio porque fue idea de Verhoeven y se resiente de este legado. “Cuando tienes [en tu currículum] uno de los planos eróticos más famosos del mundo del cine, eclipsa a la película, que es un tenso y psicológico filme negro moderno y no lo has escrito”, lamenta Eszterhas.
Todo apunta a que este misterio, convertido en mito de la cultura pop, jamás será resuelto. En esa habitación solo estaban Stone, Verhoeven y De Bont, porque la actriz pidió rodar la escena al final de la jornada y sin nadie más delante. La relajación que consiguió gracias a esa intimidad se le volvió en contra, pero también la convirtió en el mito erótico oficial de los 90: toda una generación de adolescentes se hicieron hombres de golpe tras ver Instinto básico.