Especialmente en el voto por correo: El sistema de voto por correo del plan de Carmena de participación ciudadana no impide el fraude
El voto por correo de las propuestas ciudadanas del Ayuntamiento de Madrid que finalizó ayer no es cien por cien seguro. El motivo es que permite usurpar la identidad de otra persona y participar en su nombre, aunque esto suponga la comisión de varios delitos: falsedad documental o suplantación de estado civil, así como el robo de un documento nominativo, penados todos ellos con entre los 6 meses y los cuatro años de cárcel.
Solo se anulará el sufragio en el caso de que la «víctima» vote por cualquiera de las otra dos vías existentes, la presencial que arranca hoy y concluye el próximo domingo –en alguna de las 130 mesas que se distribuirán por las Juntas de Distrito o centros municipales– o por internet, durante el mismo periodo. Ambos métodos permiten detectar duplicidades a través del código de verificación que el sistema envía cuando se vota de forma digital. Esta clave la obtiene el presidente de la mesa en la tableta que lleva configurada cuando introduce el DNI del sujeto. Así lo indicó a ABC Miguel Arana, director del proyecto de Participación Ciudadana.
Si alguien sospecha que han hecho un envío postal en su nombre, para lo que lo tienen que firmar y anotar su DNI, pueden impugnar el resultado, agregó. Con todo, el director del proyecto de Participación Ciudadana. Área que dirige Pablo Soto, considera que «una cosa es que se pueda hacer y otra es que se quiera correr el riesgo». Hasta el viernes, de los 2,7 millones de personas empadronadas, mayores de 16 años, con derecho a participar, solo 130.000, apenas un 5% lo habían hecho por correo. Las cartas se enviaron en enero. El escrutinio se hará el día 20 y los resultados, el 21.
«El sistema de votación es igual de inseguro o de seguro que en el caso de cualquier elección en el ámbito político, aunque en este caso, el resultado es vinculante políticamente pero no legalmente, por lo que hacer un cuestionamiento a ese respecto, carece de sentido». Arana recalcó:«No es un proceso electoral y no se rige por las mismas normas».