Incapacidad de Podemos: Madrid devorada por la basura
El distrito de Centro, presidido por Jorge García Castaño, es uno de los principales focos turísticos de Madrid. A la vez, es uno de los más afectados por la falta de limpieza.
El eje de la Puerta del Sol y el entorno de la Plaza Mayor, dos de los enclaves más transitados, muestran los estragos de la falta de civismo y las deficiencias de los servicios de limpieza y recogida de basuras. Si bien ambas zonas destacan por su buena apariencia, en las calles adyacentes la situación es completamente la contraria. No obstante, la fuente ubicada en Sol amanece últimamente llena de latas y botellas, desde que los pinchos que la rodeaban fueron eliminados para que la gente se sentase.
Uno de los espacios más visitados por los turistas es el Mercado de San Miguel, detrás de la Plaza Mayor. Dado que es una zona con numerosos restaurantes, la acumulación de basura en los contenedores es algo habitual. Ayer, en la parte trasera del transitado espacio gastronómico, había todo tipo de residuos, con un váter como el elemento más destacado. «Hay cosas que pueden entenderse por los restaurantes, pero justo por eso debería haber más limpieza», declara una pareja de sevillanos que visitan la capital durante toda la semana.
«No basta con barrer, hay que baldear con agua y jabón», opina un trabajador de una tienda de «souvenirs» en la Calle Mayor, que prefiere mantener el anonimato. Lo cierto es que en algunas de las estrechas e históricas callejuelas, los regueros en las paredes y el suelo no desaparecen. Es el caso de la calle del Codo, que une la plaza de la Villa con la del Conde de Miranda, el hedor a orines.
La frecuencia y la intensidad de la limpieza es algo que también denuncian los vecinos de Centro y sus comerciantes. El presidente de la Asociación de Empresarios de la Gran Vía, Florencio Delgado, asegura que «la suciedad no se soluciona como se debe». «En los lugares donde hay más peatones debería limpiarse el doble porque la afluencia es el doble», añade. El principal problema que señalan los comerciantes de esta zona comercial, la más importante de Madrid, es que las papeleras «siempre están llenas». Emilio García, responsable del quiosco situado cerca de Primark, sostiene que «se vacían muy poco: ni yo ni nadie tiene donde tirar un simple papel».
La afección de la basura es evidente de cara al comercio y el turismo, aunque los datos más recientes revelan precisamente lo contrario. La falta de soluciones al problema de la limpieza, estancado a pesar de que el Gobierno de Manuela Carmena lo ha situado como una prioridad, coincide con un repunte de los visitantes.