Datch Waifu, la muñeca sexual que arrasa en Japón
Japón pone de moda tendencias estéticas, tecnológicas y ahora también muñecas sexuales. La gran novedad del sector tiene nombre propio: Datch Waifu. Se trata de una muñeca hecha de látex, vinilo y silicona, tienen esqueleto metálico, articulaciones y cabello natural. Parece completamente real, al menos a simple vista.
Ninguna muñeca se parece a otra, son personalizadas y únicas. El comprador puede elegir su altura, el tamaño de su pecho, de su trasero y hasta la expresión que quiere que tenga en la cara.
Además, una de las grandes novedades de Datch Waifu es que se le puede añadir voz, puede repetir algunas frases que elija el cliente con anterioridad a su compra. También tiene un sensor de movimientos y cuenta con toda una línea de ropa, maquillaje y accesorios para poder cambiar su aspecto siempre que se desee.
Algunos japoneses hasta coleccionan este tipo de muñecas y las cuidan casi como si fueran personas de carne y hueso. Las más sofisticadas pueden llegar a costar alrededor de 650.000 yenes (4.200 euros), pero eso sí, tienen garantía de por vida.
También existe una versión masculina con las mismas características, los conocidos como ‘Datch Husbands’, pero no cuentan con tanto público como la versión femenina.
Llevan en el mercado unos 10 años pero el éxito de estas ‘Sex dolls’ ha despegado en los últimos meses, sobre todo entre los japoneses. Entre los motivos que dan los compradores de este tipo de juguetes sexuales es que con ellos evitan la transmisión de enfermedades de carácter sexual.