Aunque seguirán en la Comunidad de Madrid: Renfe amenaza con trasladar su sede fuera de Madrid si no sale la Operación Chamartín
El desarrollo Norte de Madrid, lo que se conoció durante años como la ‘operación Chamartín’, sigue a pies juntillas los planes de la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena. La reunión que mantuvieron en el Ministerio de Fomento Ayuntamiento de Madrid, Comunidad de Madrid, Renfe, Adif y BBVA acabó sin acuerdo. Carmena no se movió de sus planteamientos, de que su propuesta, que reduce un 46% la cifra de viviendas, de 17.600 a 4.600. Señaló que ese nuevo plan había sido aprobado en Pleno y que no podía ir en contra de esa decisión, según precisaron fuentes de los asistentes.
Pero la intervención más llamativa fue la del presidente de Renfe, Pablo Vázquez Vega, quien aseguró que la compañía está en unas instalaciones temporales y que «están valorando, ya que el proyecto no sale adelante, llevarse la sede central fuera de Madrid». Desde Renfe confirmaron las palabras de Vázquez Vega y explicaron que la entidad «tiene una situación compleja, sobre todo la central, ubicada en la calle Pío XII, que es lo más afectado por la operación Chamartín. Allí hay una serie de edificios antiguos -complejo conocido popularmente como las caracolas- y necesitamos una sede nueva. La cuestión es que si no sale la operación necesitamos una solución por un puro funcionamiento logístico. Nos obligará a salir fuera de la capital, aunque no dejaremos la región. Es un tema operativo puro y duro.
También tuvo una intervención destacada el presidente del BBVA, Francisco González. La entidad bancaria es la mayoritaria en el consorcio que forma junto con la Constructora San José para la explotación de los derechos urbanísticos.
La fuentes informantes explican que González le dijo a la alcaldesa que «con estas decisiones unilaterales lo que está provocando es que los que quieran invertir en la ciudad estén en situación de estampida». «Alcaldesa, los que la están asesorando no lo están haciendo bien», precisan que le ha dicho. Asimismo, le ha pedido que recapacite, pasar a decirle que si lleva a Pleno el proyecto anterior, el consensuado, el que ha tumbado y se aprueba «en una semana estamos trabajando».
«Vamos a arriesgar mucho dinero y el tiempo nos dirá si la operación ha sido rentable o no. Queremos que el proyecto salga adelante por el bien de Madrid y por el bien de España», señalan.