Vivienda pública, una política inexistente en Pozuelo
Si en algún aspecto los sucesivos gobiernos del Partido Popular en Pozuelo han sido constantes en su cerrazón, es con el tema de la vivienda. Pozuelo es una ciudad que carece de política de vivienda, nunca la tuvo, es una política que siempre se ha dejado al albur del mercado, con los problemas de desigualdad que esta estrategia suscita en relación a un derecho ciudadano, que en el caso de Pozuelo queda en el aire.
La filosofía del PP de Pozuelo siempre fue la misma, ya desde tiempos de José Martín Crespo la contestación a la pregunta, -¿Para cuando una política de vivienda pública en Pozuelo?-, se contestaba con un displicente, soberbio e irresponsable “Váyase usted a Parla si quiere vivienda pública”. A lo largo de estos casi 40 años de ayuntamientos democráticos solo en una ocasión se planteó a medias una política de vivienda pública en nuestro municipio y fue durante la época de Jesús Sepúlveda, persona de oscuras referencias y más oscuras amistades, que enturbió con sus vinculaciones a tramas corruptas un pedazo de la historia de Pozuelo. Puede parecer razonable que tras antecedentes tan poco brillantes en lo que a vivienda se refiere, los equipos de gobierno de Adrados y Pérez–Quislant plantearan al menos un mínimo atisbo de política de vivienda pública en Pozuelo, pero no, hemos vuelto a los orígenes “Si quiere usted vivienda pública, ya sabe, váyase a Parla”.
Puedo entender el infausto deseo del PP de poner por delante los votos a las necesidades de los vecinos de Pozuelo, pero no puedo compartirlo; en esa forma obtusa de observar los procesos sociales de la cual hace gala el PP con demasiada frecuencia, los sucesivos gobiernos municipales en Pozuelo han primado la expulsión de los jóvenes, por la imposibilidad de acceder a una vivienda en nuestro municipio, respecto a dar respuesta al derecho a una vivienda digna, y con ello, han eliminado la potenciación de nuestra identidad como pueblo y la posibilidad de utilizar la política de vivienda para reactivar determinadas zonas de Pozuelo muy deprimidas por el envejecimiento poblacional y la incidencia de la crisis.
Son muchos los que han tenido que buscar en otros municipios un espacio para su emancipación o un lugar para desarrollar una familia, son muchos los que se han visto obligados a dejar amigos y familia por la imposibilidad de acceder a una vivienda en Pozuelo por los elevadísimos precios de la vivienda libre tanto en compra como en alquiler. Pero también son muchos los que a día de hoy integran las listas de vecinos que pretenden una vivienda pública de precio razonable, en concreto 2.867, según la última adjudicación hecha en Humera. 18 viviendas en los últimos 9 años es el “brillante” balance de los equipos de Adrados y Pérez-Quislant, una burla a aquellos vecinos y vecinas que pueblan las zonas más antiguas de Pozuelo, pero también a aquellos que vinieron a Pozuelo en la década de los 80 y que han visto cómo sus hijos se han tenido que ir lejos y sin duda es una burla a aquellos vecinos que han estado llegando en la década de los 90, que a no mucho tardar verán a sus hijos tenerse que ir de Pozuelo; es un bucle permanente que hace de Pozuelo una ciudad sin identidad, sin referentes, una ciudad que permanentemente recambia su población, sin objetivos comunes, donde la historia se entierra y el futuro pasa por nuestro lado de forma tangencial sin ser protagonistas del mismo. No pasará mucho tiempo y acabaremos siendo un mero distrito de Madrid.
En el Pleno de mañana nuevamente vamos a intentar que Pozuelo adopte una política de vivienda pública necesaria, especialmente para muchos jóvenes. Por si no lo sabían, el Ayuntamiento de Pozuelo tiene 50 viviendas públicas sin adjudicar mientras hay vecinos y vecinas que se tienen que ir por no tener acceso a vivienda. En este caso no hablamos de construir nuevas viviendas, eso ya lo hicimos con motivo de la discusión de presupuestos y pasaron por encima de la propuesta sin explicaciones, estamos hablando de viviendas ya construidas, en perfectas condiciones para entrar a vivir, en la promoción de Miradores II en la Plaza de España, ¡que despropósito!. Además entendemos que esas viviendas deben adjudicarse a personas que estén en situaciones difíciles, personas que cobren menos de 1.900 euros/mes, que el 70% de los que concurran sean menores de 35 años y que el esfuerzo de pago mensual no supere el 30% de la renta familiar. Medidas lógicas para favorecer en un primer momento a aquellos que tienen más necesidades y a los jóvenes del municipio. Por ello presentaremos una moción encaminada a la adjudicación en el plazo máximo de tres meses de las mencionadas viviendas.
Señores y señoras del PP, hacer política de vivienda es como hacer política de limpieza o políticas sociales, es inherente a la actividad municipal, constituye una parte fundamental del modelo de ciudad y forma parte de la política de derechos que toda administración pública tiene la obligación de garantizar. “Pónganse las pilas”, no hagan tantos números con los votos y trabajen para los vecinos y vecinas de Pozuelo.
Ángel González Bascuñana, portavoz del Grupo Municipal Socialista en Pozuelo
No es de extrañar, Sr Bascuñana, lo que se esta haciendo en Pozuelo desde hace unos treinta años, se llama “Gentrificacion”, le recomiendo se documente sobre el tema, hay mucho y muy variado sobre el tema, como en todo a favor y en contra, pero le aseguro que con su lectura, hallara respuesta a las políticas en materia de vivienda de nuestro denostado ayuntamiento, hay estudios realizados por los mas diversos profesionales sobre la materia, que a buen seguro le ayudaran a mantenerse ojo avizor, créame si lo hace con el tiempo, me lo agradecerá, un saludo, “Salud y República”.
Muchas gracias por su participación. Saludos