La presidenta Cristina Cifuentes viene a Pozuelo y todo indica que a dejarle las cosas claras a Susana Pérez Quislant aunque no diga nada
El próximo miércoles día 2, la presidenta de la Comunidad de Madrid Cristina Cifuentes viene a Pozuelo. Bien. Lo que pasa es que no viene al Ayuntamiento ni su visita es oficial. Mal.
La presidenta Cifuentes viene a Pozuelo a celebrar con el PP la copa de Navidad. El próximo día 2, Cristina se reúne con los miembros del PP de esta ciudad en el restaurante Taberna La Lonja a las 8 de la noche, invitada por Paloma Adrados, que sigue siendo la presidenta del PP de Pozuelo, como todo el mundo sabe.
O sea, que la presidenta viene a Pozuelo pero a un acto privado. O sea, que, con esta visita todo indica que le viene a dejar las cosas claras a la alcaldesa Quislant. Bueno, a la alcaldesa y a todos los que le juraron fidelidad eterna hace unas semanas… Y, por supuesto, al partido enterito.
Cristina está con el Partido Popular, pero no está con la política que está siguiendo la alcaldesa de Pozuelo del Partido Popular…
Por supuesto, todo el mundo lo negará… Incluido, obligarán al diario pesebrero a negarlo. Y se harán fotos juntas. Y todos las publicaremos. Tranlarala, tranlarala… Pero yo estoy hablando de hechos: La presidenta Cristina Cifuentes viene a Pozuelo pero no viene a hablar de política municipal y autonómica con Susana Pérez Quislant.
En política, los gestos hablan más que las palabras. No hace falta que diga nada. Venir a la copa de Navidad del PP invitada por Paloma Adrados sin haber mostrado intención alguna de venir en visita oficial al Ayuntamiento a hablar con la alcaldesa Quislant, desde que asumió la responsabilidad de gobernar la Comunidad, es todo un gesto… No hace falta que diga nada.
Al loro, concejales…
La Piraña del Meaques